Palestina: un Pueblo Prisionero en su Propia Tierra.
Edgardo Hidalgo Callejas, Editor
El tema de Palestina es complejo porque involucra al Estado de Israel y cualquier cosa que se diga que los afecte es a riesgo de ser acusado de antisemitismo, relacionando esta palabra al sufrimiento y exterminio que el régimen nazi realizó contra la raza judía, lo cual suscita una inmediata solidaridad. No sé si este es el motivo del silencio en la prensa mundial ante la situación que sufren los palestinos con la “ocupación” del Estado de Israel en sus territorios, más allá de los acuerdos internacionales aceptados.
La situación de Palestina, mirada desde la denuncia de ese pueblo al mundo no tiene cobertura periodística, lo que hace pensar erróneamente que “nada pasa allí”.
Este reportaje pretende buscar en las fuentes posible qué ocurre con el conflicto actualmente, dando una oportunidad a los palestinos de mostrar su versión y para ello se fue a las páginas de Internet que no son de preocupación del periodismo internacional.
Veamos algo de la historia:
“El 14 mayo de 1948 se proclamó en Tel Aviv la creación del Estado de Israel. Esta declaración entró en efecto un día después de que se retirasen de la región las últimas tropas británicas, según el programa elaborado en las Naciones Unidas. Ese día, cinco ejércitos árabes provenientes de Jordania, Egipto, Líbano, Siria e Irak invadieron el nuevo Estado. Como resultado del conflicto Israel mantuvo el territorio asignado por las O.N.U. más una buena parte del territorio asignado a los árabes y la parte occidental de Jerusalén (Israel aumentó su territorio en casi un 50%). Quedaron en manos de los árabes la zona occidental del Jordán (conocida como Cisjordania después de la anexión jordana), ocupada por Transjordania y la Franja de Gaza, ocupada por Egipto.” (es.Wikipedia.org/wiki/Historia del_ Estado_de_Israel).
Desde aquellos años las relaciones siguieron tensas y cada cierto tiempo se produjeron varias guerras: En octubre de 1956 Israel invadió Gaza y la península del Sinaí.
“El 5 de junio Israel ataca a Egipto, Jordania y Siria y en 6 días toma el total control de la península del Sinaí, la franja de Gaza y los Altos del Golán, así como la región occidental del Río Jordán, incluyendo el este de Jerusalén”. (es.Wikipedia.org/wiki/Historia_del_ Estado_de_Israel).
El 6 de octubre de 1973 (Yom Kipur) los ejércitos de Siria y Egipto invadieron Israel, para recuperar territorios perdidos; pero en menos de un mes las fuerzas israelíes recuperaron las zonas perdidas momentáneamente y avanzaron hasta 32 km de la capital Siria; además cruzaron el canal de Suez en Egipto. Finalmente, Israel se retiró de parte del nuevo territorio conquistado.
En noviembre de 1977 el presidente egipcio Anwar el-Sadat visitó Israel después de 30 años de hostilidades. En 1979, marzo 26, Jimmy Carter, Begin y Sadat firmaron un tratado, por el cual Israel debió devolver el Sinaí y la zona del Golfo de Aqaba (materializado el 26 marzo, 1979). En este tratado se estructuró un plan de régimen temporal de gobierno para Cisjordania y Gaza para otorgarles autonomía total a los palestinos residentes allí, cuestión que no ha cumplido Israel.
En 1982 Israel invadió el sur del Líbano para atacar a la Organización para la Liberación de Palestina que se habían establecido allí. Durante los 18 años siguientes se mantuvo en esa zona para resguardarse de hipotéticos actos de ofensiva árabe. En mayo del 2000, Israel retiró su ejército de la “zona de seguridad” en el Líbano.
En el 2006 se reanuda el conflicto con el secuestro de 2 soldados israelíes y se producen combates en el sur del Líbano (segunda guerra del Líbanos).
La beligerancia entre Israel y el pueblo palestino se ha mantenido desde los inicios del Estado de Israel en 1948, en un principio con participación de los países árabes de la región, que poco a poco se han ido retirando, como ocurrió con Egipto y la visita de Anwar el-Sadat (acuerdo de Camp David), y después con Jordania (octubre-1994) como consecuencia de la Conferencia de Paz de Madrid.
La historia en la actualidad.
Pero estas páginas no son para conocer la historia, sólo se pretende poner en contexto al lector para poder entender la situación actual, que es la que en definitiva importa.
Israel es un país con una fuerte expansión humana, con el retorno de miles de inmigrantes llegados de todo el mundo, especialmente de los países de Europa, como la ex Unión soviética que suman más de un millón de personas.
(https://embassies.gov.il/madrid/AboutIsrael/history/Pages/HISTORIA-Estado-Israel.aspx)
Esta llegada masiva de inmigrantes con plenos derechos para volver a su patria, genera una fuerte presión al gobierno para alojarlos y facilitar su inserción en la sociedad. Desgraciadamente la solución afecta a los territorios palestinos y sus fuentes de sustento. Es difícil determinar si la ausencia de paz es por culpa de los palestinos que se resisten a entregar, o compartir sus territorios, o Israel tiene como solución en sus manos la expansión militar fuerte y sin burocracia internacional y así ocupar nuevos territorios y hacer “asentamientos” para su creciente población, a expensas de la población palestina que ha vivido allí por cientos de años y sin poder de fuego para contrarrestar dicha expansión.
La inoperancia de las ONU.
Los datos de las Naciones Unidas señalaban que la población del Estado de Palestina “al año 2017 era de un total de 5.538.368 repartida en Cisjordania 3.393.770, Jerusalén Este 524.900 y la Franja de Gaza 1.943.398. Según el PCBS, la densidad de población en 2009 era de 654 personas por kilómetro cuadrado, con una importantísima brecha entre Cisjordania y Jerusalén Este (que tiene con 433 pers/km² ) comparado con la Franja de Gaza, una de las regiones más densamente pobladas del mundo, con 4.073 pers/km². Más de dos quintas partes de la población palestina (41,9%) eran menores de 15 años, mientras que tan solo el 3% de los habitantes superaban los 65 años de edad.
(https://es.wikipedia.org/wiki/Demograf%C3%ADa_de_Palestina#C%C3%A1lculos_de_la_ONU)
Según las estimaciones de la Oficina Central de Estadísticas israelí, al 31 de diciembre de 2021, la población de Israel era de 9.217.000 y la de Palestina 4.803.000 habitantes. Durante el año 2021, la población israelí se incrementó en un 1.7%. el 83% de este crecimiento se produjo debido al crecimiento natural y el 17% restante, como consecuencia del balance migratorio internacional. (MINISTERIO RELACIONES EXTERIORES ISRAELÍ https://www.gov.il/es/departments/news/israel-poblacion-inmigracion-judios-arabes)
¿Qué dice las Naciones Unidas?
Hasta el 2001 hay 26 Resoluciones emanadas por este organismo internacional que Israel no las ha cumplido, sin contar otras de su Comisión de Derechos Humanos.
Revisando a qué temas se refieren:
.- La ciudad de Jerusalén como “cuerpo separado” bajo régimen internacional (Resolución 303 ,9/XII/1949 y 114C.S 20/XII/1949).
.- Rechazo a la expansión militar (resoluciones 2253, 2254, 242 C.S., 2851, ES- 10/3), relativa a anexión de territorios, asentamientos, demolición de villas palestinas, expulsión, torturas, etc.
.- Asentamientos en Jerusalén del Este, Resoluciones 51/223, ES-10, ES 10/2.
.- Reconocimiento del derecho del pueblo palestino (Resolución 2628, 2649, 3070. 3236. E/CN.4/RES/2001/2 C.D.H.)
.- Reconocimiento de la Organización para la Liberación palestina, R 3237 y luego la Nación Palestina (R. 43/177)
.- Resolución 904 C.S. 18/03/1994 que condena una masacre de 63 civiles.
Además, Israel es el único país que no ha presentado los límites de sus fronteras, lo cual es una exigencia ineludible de las Naciones Unidas para pertenecer a ella.
La situación palestina ha tenido fuertes reacciones en organizaciones y personeros de países en todo el mundo; pero los medios de comunicación son renuentes a informar. He aquí un ejemplo: La ministra sudafricana de Relaciones Internacionales y Cooperación, Naledi Pandor, afirmó que “Israel debería ser declarado Estado de apartheid y que la Asamblea General de las Naciones Unidas debería crear un comité para verificar si cumple con esos requisitos”. “Como sudafricanos oprimidos, experimentamos de primera mano los efectos de la desigualdad racial, la discriminación y la negación, y no podemos quedarnos de brazos cruzados mientras se deja atrás a otra generación de palestinos”.
He aquí 2 ejemplos de noticias que no son difundidas por ningún medio a nivel mundial ni a nivel local:
Hoy 6 agosto 2022: “Ya van 21 palestinos asesinados, unos 150 heridos y más de 700 viviendas bombardeas y destruidas por la aviación militar israelí. Atacar a los civiles es la estrategia criminal de la ocupación israelí de castigar a la población civil para aplacar la resistencia palestina en contra de la ocupación militar”.
Hoy 11 de mayo, “…militares israelíes asesinan a una periodista palestina de Al JazeeraTV. Iba perfectamente identificada como “PRENSA” en su chaleco protector”. (https://www.palestinalibre.org/articulo.php?a=78356)
La repartición de la Tierra, sin tomar en cuenta “a los que la viven allí”.
La justa pretensión de los judíos dispersos por el mundo, de tener una patria que los aloje como a todos los ciudadanos, de todos los pueblos, de todas las razas y religiones, merece una solución. Desgraciadamente al retirarse los británicos (1948) se creó el Estado de Israel, sin la participación de los palestinos ni la voz del mundo árabe. Como ha ocurrido muchas veces en la historia los territorios se reparten entre 4 paredes, según los intereses de las grandes potencias y sin consulta con los pueblos afectados. Si no creen, pregúntenle a los Kurdos como su pueblo fue repartido entre Siria, Irak, Irán y Turquía, cuando Francia y los británicos se repartieron el Medio Oriente después de la caída del Imperio Otomano y sin ninguna participación de ellos (acuerdo secreto de Sykes-Picot); o los aimaras que quedaron repartidos entre Bolivia, Perú, Chile y Argentina. Podría citarse más, de los muchos pueblos divididos y dispersados en todos los continentes.
Las Grandes potencias con sus intereses económicos y por hegemonía política actúan lejos de sus fronteras repartiéndose el mundo y buscando sus propios equilibrios, sin considerar los intereses de los países, ni menos las culturas y razas de ellos.
Los británicos, ya retirados del Medio Oriente y con el mandato de la ONU aprobado, se hizo la partición de palestina para crea 2 estados independientes: uno árabe y el otro judío, cuestión que tenía la oposición de los países árabes de la región, pero no se les tomó en cuenta porque primaban los intereses de las grandes potencias. Así se generó este foco de violencia que,74 años después, aún sigue vigente y sin solución… y además sin interés por encontrar una salida diplomática y pacífica.
Las voces no escuchadas:
Pero el pueblo de Israel, los judíos propiamente tales, no están todos de acuerdo con las medidas degradantes que toma el Gobierno Central el Estado de Israel. B´Tselem es una organización israelí de Derechos Humanos formada por profesionales, periodistas y gente de mayor sensibilidad, presidida actualmente por Hagai El-Ad (premiada internacionalmente), que actúa para cambiar la política de su gobierno y garantizar que los derechos de los palestinos sean respetados.
El famoso músico, pianista y director de orquesta, Daniel Barenboim, nacido en Argentina y nacionalizado israelí por su origen creó junto a Edward Said, (filósofo, literato, músico palestino) la famosa orquesta West-Eastern Divan Orchestra que reúne a talentos musicales judíos, palestinos, y árabes de otros orígenes. Ha recorrido el mundo y en 2005 tocó en Ramala. Tiene el premio Príncipe de Asturias y otro de Japan Arts Association. Pretenden a través de la música crear puentes de comprensión y paz, y con ello evitar el odio que los separa.
El Estado de Israel no significa que piense igual que las personas judías. Todos los gobiernos del mundo pareciera que no tiene las mismas reglas morales y éticas en su actuar, como lo hacen los individuos de cada país por cultura, tradición y religión.
Y ahora qué:
Sin duda el tema Palestina-Estado de Israel, es una piedra en el zapato de O.N.U. Los países más influyentes y poderosos como U.S.A., la Federación Rusa y ahora China, toman partido según sus propios intereses: son peones de ajedrez en su tablero de disputas políticas. Por otra parte, el resto de los países árabes de la región no tienen intenciones de inmiscuirse, agobiados por sus propios problemas e intereses políticos y económicos. Egipto y Jordania ya tienen acuerdos de paz. Así, Palestina está sola y su causa se ve apagada ante la enorme influencia de Israel en el plano político, económico y de las comunicaciones periodísticas de las principales agencias del mundo. Hay un silencio que no se condice con otros hechos menos lamentables que acaparan y llenan los espacios televisivos y periodísticos.
